lunes, 21 de junio de 2010

CUADRO COMPARATIVO DE IMPRESORAS

TIPO DE IMPRESORA

SUMINISTRO DE IMPRESION

COPIAS POR MINUTO

RENDIMIENTO

NEGRO

COLOR

NEGRO

COLOR

Impresoras de rueda

Cinta entintada

3.000 líneas por minuto

---------------

2 millones de caracteres

---------------

Impresoras de margarita

Cinta entintada

3 ppm

---------------

5 millones de caracteres

---------------

Impresoras matriciales o de agujas

Cinta entintada

5 y 25 ppm

----------------

18 millones de caracteres

---------------

Impresoras de tambor

Tela entintada

7 ppm

-----------------

3 millones de caracteres

---------------

Impresoras de barras

Cinta entintada

5 Y 10 ppm

-----------------

4 millones de caracteres

---------------

Impresoras de cadena

Cinta entintada

4Y 7 ppm

-----------------

4 millones de caracteres

----------------

Impresoras térmicas

´

Cartucho de tinta

4 y 8 ppm

2 a 4 ppm

8.000 páginas al mes

8.000 páginas al mes

Impresoras de inyección de tinta

Cartucho de tinta

33 ppm

30 ppm en color

3.000 paginas al mes

1.800

Paginas al mes

Impresoras electrostáticas

Toner

50 ppm

15 ppm

120.000 páginas al mes

120.000 páginas al mes

Impresoras láser

Toner

55 ppm

20 ppm

100.000

paginas al mes

100.000 paginas al

Mes

CUIDADO Y MANTENIMEINTO A IMPRESORAS

La impresora es un periférico que resulta a veces imprescindible, disponible desde unos precios bastante bajos y que en realidad no necesita unas atenciones excesivas, pero sí un cierto mantenimiento.

Vamos a ver en qué consiste este mantenimiento:

Los materiales que podemos necesitar son pocos, ya que no es conveniente (ni en muchos casos posible) desmontar demasiado.
Vamos a necesitar los siguientes materiales:

- Una brocha o paletina de unos 3cm.
- Un par de trapos de algodón.
- Un poco de alcohol (el mejor es el alcohol de limpieza o el de quemar).
- Un poco de grasa con base de grafito (la podemos encontrar en tiendas de electrónica).
- Es conveniente un bote de aire comprimido.

En general, y como cualquier cosa, debemos procurar que esté limpia de polvo y demás. Esto es fácil, ya que para ello tan sólo necesitamos una brochita, un trapo y un poco de tiempo y paciencia. Si es mucha la suciedad que se ha acumulado podemos emplear un poco de alcohol (siempre sobre el trapo, nunca directamente, y siempre después de haber eliminado todo el polvo), secándola siempre muy bien.

En casos de suciedad extrema y grasas (como por ejemplo, impresoras de cocina en restaurantes), podemos limpiar el exterior de ésta con un poco de desengrasante (repito, SIEMPRE aplicando este sobre el trapo, NUNCA directamente sobre la impresora), pasando posteriormente un trapo húmedo para terminar secándola muy bien. Esto puede dañan algo las partes de plástico (pérdida de brillo y pérdida de logotipos impresos), pero se trata de eliminar la grasa acumulada, que siempre va a ser más perjudicial. Debemos evitar llegar a estos extremos, ya que la acumulación de este tipo de suciedad puede provocar serias averías.

En cuanto a un mantenimiento un poco mayor, vamos a ver cuál debe ser este, dependiendo del tipo de impresora:

Impresoras matriciales:

Este tipo de impresoras ya prácticamente no se utilizan en la casa, pues tienen muchísimas desventajas en relación a una impresora de chorro de tinta, pero sí que se siguen utilizando en oficinas, ya que es el único tipo de impresora que permite imprimir en papel copiativo, ya sea continuo u hojas sueltas.

Además de lo ya indicado, en estas impresoras es muy conveniente aplicarles de vez en cuando aire a presión por la zona del carro, ya que el papel continuo (que es el que más se suele utilizar en este tipo de impresoras) suele dejar bastantes residuos, los cuales hay que eliminar.

Además, estas impresoras tienen un rodillo muy similar al de las máquinas de escribir, en el que se suele acumular tinta con el paso del tiempo, bien porque esta traspase el papel o bien por impresiones sobre el carro sin que haya papel. También se suele ''satinar'' con el roce del papel, lo que hace que pierda adherencia. Este rodillo también se debe limpiar de vez en cuando. Para ello utilizaremos alcohol sin aditivos (no se debe utilizar ni limpia-cristales ni colonias). Con este alcohol empapamos un trapo y limpiamos de forma enérgica dicho rodillo, secándolo después muy bien.

También debemos limpiar los carros de tracción, bien con una brochita o bien aplicando aire a presión.

Si observamos bien veremos que la cabeza de impresión se desplaza sobre una guía metálica. Debemos procurar que esta guía no se reseque, para lo que podemos aplicar de vez en cuando un poco de grasa con base de grafito (OJO, nunca debemos aplicar aceites ni vaselina, ya que estos tienden a secarse). Esta grasa SOLO se debe aplicar si vemos que esta guía se encuentra muy seca, hasta el punto de impedir el desplazamiento suave del cabezal.

En cuanto a la cinta impresora en sí, estas cintas se suelen gastar bastante, se suelen romper y desprender mucha suciedad (sobre todo las que están hechas con tejido de algodón) y además se secan bastante con el simple paso del tiempo, por lo que debemos vigilarlas y cambiarlas bastante a menudo. Son bastante económicas, pero el número de impresiones con una cierta calidad es muy limitado

Impresoras de chorro de tinta:

Este tipo de impresoras son con mucho las más utilizadas en un uso doméstico.

Salvo en cuidado externo no suelen ser impresoras que necesiten un mantenimiento especial si se utilizan habitualmente.
Los problemas con estas impresoras vienen cuando sólo imprimimos de tarde en tarde (este tipo de impresoras se estropean más por la falta de uso que por usarlas), ya que los inyectores son sumamente finos y la tinta tiende a secarse en ellos (algo menos las tintas originales, bastante las genéricas y mucho las de recarga).

Para evitar esto hay un método bastante simple que yo suelo recomendar, y que consiste en hacernos una plantilla (que puede ser en cualquier procesador de texto o en Paint) que tenga los colores básicos, es decir, negro, azul, rojo, verde y amarillo. Si no utilizamos la impresora, al menos una vez por semana debemos imprimir este patrón.

Todas las impresoras suelen tener unas herramientas de mantenimiento entre las que se encuentra una denominada Limpieza de cabezales. Esta herramienta es bastante eficaz cuando la impresión no es todo lo buena que debiera, y en realidad consiste en aplicar tinta con una presión superior a la utilizada normalmente. Esto nos puede limpiar unos inyectores algo bloqueados, pero el gasto en tinta para hacerlo es bastante alto, por lo que debemos evitar abusar de este sistema.

Hay varias formas de incorporar los inyectores. En unos casos estos están en el propio cartucho de impresión (suele ser el caso de HP, Lexmark y alguna marca más). En otros los cabezales están en el mismo cabezal de impresión, pero es una pieza independiente que se puede sustituir fácilmente (es el caso de bastantes impresoras Canon) y en otros los cabezales se encuentran en la propia impresora, en el cabezal de impresión, pero estos no se pueden cambiar (los tienen que cambiar en el servicio técnico), como es el caso de Epson y algunos modelos del tipo Photo de HP y otras marcas.
En el caso de los cartuchos que incorporan el cabezal, si bien son más caros, estrenamos cabezales cada vez que cambiamos el cartucho, por lo que el mantenimiento de estos es inexistente.
En el caso de los cabezales reemplazables, estos se deben cambiar cada cierto tiempo para un buen funcionamiento. Las marcas respectivas que utilizan este sistema indican cada cuanto tiempo se deben reemplazar estos cabezales.
En el caso de impresoras en las que el usuario no puede reemplazar los cabezales ya hemos visto una forma de mantenimiento para estos.

Hay en el mercado unos cartuchos parecidos a los de tinta, pero que contienen un producto especial para la limpieza de los cabezales. Estos cartuchos no suelen ser demasiado caros es son un buen remedio ante cabezales muy sucios u obstruidos, algo que podemos probar antes de llevarla al servicio técnico.



En general yo siempre aconsejo utilizar tintas originales. Realmente son más caras que las genéricas o recicladas, pero alargan bastante la vida de nuestra impresora y la calidad de impresión es superior.

Si nos fijamos, veremos que la cabeza de impresión se desplaza sobre una varilla metálica. Debemos evitar que en ésta se acumule suciedad y, sobre todo, que se reseque. Aunque tarda bastante en resecarse si utilizamos la impresora habitualmente, de no utilizarla también se puede resecar e incluso oxidar. Podemos limpiar esta varilla con un trapo seco y a continuación aplicar un poco de grasa con base de grafito (nunca vaselinas). Esta grasa SOLO se debe aplicar si vemos que esta varilla se encuentra muy seca, hasta el punto de impedir el desplazamiento suave del cabezal.

También debemos vigilar la cinta de desplazamiento del cabezal (es una cinta fina y dentada). En cuanto veamos que empieza a deteriorarse debemos llevarla a cambiar, ya que su rotura puede causar averías más graves.



En todo caso, debemos vigilar y limpiar cualquier mancha de tinta que veamos en el mecanismo de arrastre y/o sujeción del papel o del cabezal.

Si se trata de una impresora de gama alta puede resultarnos rentable llevarla cada cierto tiempo (dos o tres años) al servicio técnico oficial a que le hagan una revisión y limpieza interna. No suele ser una operación cara y nos va a mantener en orden la impresora durante otros dos o tres años.

En la bandeja de entrada de papel suele acumularse bastante suciedad, por lo que es conveniente limpiar esta bandeja con una brochita o, mejor, con un poco de aire a presión.

Impresoras láser:

Las impresoras láser por lo general requieren menos mantenimiento que otros tipos de impresoras, pero este suele ser más difícil de realizar, por lo que ante fallos graves es preferible llevarlas al servicio técnico.

Todas las impresoras de deben limpiar apagadas, pero en el caso concreto de la láser no sólo debemos asegurarnos de que están apagadas, sino también desconectadas de la red eléctrica.

Dada la gran variedad de tipos de impresoras láser que hay en cuanto a la forma de colocación del tóner y de la unidad DUM, vamos a limitarnos a indicar que debemos mantener lo más limpia posible la bandeja de entrada de papel y el resto de superficies.

Muchos tóner tienen una palanquita de limpieza. Es bueno utilizarla de vez en cuando. En cuanto al resto de los componentes, en este tipo de impresoras yo siempre recomiendo acudir al servicio oficial para su limpieza (dependiendo del uso, puede ser cada dos o tres años).

Resumen:

Las impresoras no necesitan unos cuidados especiales, pero tampoco podemos abandonarlas pensando que siempre van a estar ahí, ya que en ese caso lo más probable es que nos fallen precisamente cuando las necesitemos.
En general debemos evitar llegar a tener que utilizar para su limpieza otra cosa que no sea un trapo seco suave y una brochita o mejor aire a presión, ya que cualquier producto que utilicemos puede dañarlas (como habéis visto, tan sólo indico que debemos utilizar algún producto en casos de suciedad ya incrustada).

NUNCA debemos aplicar ningún tipo de producto de limpieza ni de aceites en spray, ya que estos sí que pueden dañar seriamente nuestra impresora.

SOLO debemos aplicar grasas con base de grafito en las varillas guía si estas se encuentran resecas, impidiendo el desplazamiento suave del cabezal de impresión, y siempre en muy pequeñas cantidades. Una vez aplicada ésta, debemos retirar cualquier resto de grasa que se acumule en los extremos de la varilla.

Los cartuchos genéricos (y sobre todo los recargados) son bastante más baratos, pero también conservan peor nuestra impresora, y muy rara vez ofrecen la misma calidad de impresión.).

jueves, 17 de junio de 2010

LIMPIEZA DE CABEZALES EPSON

Videotutorial Limpieza y Mantenimiento de Impresoras

Mantenimiento de computadoras (impresora)

TIPOS DE IMPRESORAS




Clasificación general

Si queremos clasificar los diversos tipos de impresoras que existen, el método más lógico es hacerlo atendiendo a su tecnología de impresión, es decir, al método que emplean para imprimir en el papel, e incluir como casos particulares otros parámetros como el uso del color, el tamaño de su salida impresa, su velocidad, etc.

Entonces la clasificación comenzaría con una división entre las impresoras "de impacto" y de "no impacto", como su nombre lo indica las impresoras de impacto realizan la impresión golpeando al papel con unas pequeñas piezas (matriz de impresión).

Entre las impresoras de no impacto la división más grande se produce entre las impresoras de inyección de tinta y las láser, aunque existen otras tecnologías de uso menos extendido que englobaremos como "otras tecnologías".

Dentro de estas categorías encontraremos productos disímiles pero que emplean la misma tecnología para generar la impresión. Como caso especial, vamos a separar a las impresoras multifuncionales, que en su mayoría utilizan el mecanismo de inyección de tinta. Estas impresoras combinan capacidades de impresión, escaneo, copiado y a menudo fax en una sola máquina.

Impresoras matriciales

Las impresoras matriciales fueron las primeras que surgieron en el mercado, y aunque han perdido terreno últimamente frente a las impresoras de inyección de tinta, siguen siendo las únicas que pueden imprimir formularios continuos, lo que las hace una opción válida para locales comerciales que necesitan imprimir facturas.

Según como sea el cabezal de impresión, se dividen en dos grupos principales: de margarita y de agujas. Las de margarita incorporan una bola metálica en la que están en relieve las diversas letras y símbolos a imprimir, la bola pivotea sobre un soporte móvil y golpea a la cinta de tinta, con lo que se imprime la letra correspondiente. El método es absolutamente el mismo que se usa en muchas máquinas de escribir eléctricas, lo único que las diferencia es la carencia de teclado.

Las impresoras de margarita están en completo desuso debido a que sólo son capaces de escribir texto; además, para cambiar de tipo o tamaño de letra deberíamos cambiar la matriz de impresión (la bola) cada vez.

Las impresoras de agujas son las que imprimen caracteres compuestos por puntos empleando un cabezal de impresión formado por agujas accionadas electromagnéticamente, prácticamente igual a una máquina de escribir. Fueron las primeras en salir al mercado.

Los parámetros principales de calidad de impresión de una impresora matricial son el número de puntos de la matriz de agujas y su velocidad. Por lo general, las impresoras matriciales se clasifican por el número de agujas del cabezal de impresión dispuestas en forma de rectángulo. Normalmente son de 9 (usadas frecuentemente para imprimir reportes y materiales donde la calidad no es muy importante) o 24 (que permiten mayor nitidez) Algunas agujas están desaliñadas en los extremos, para marcar comas, etc.

Funcionamiento

Este tipo de impresora es de impresión bidireccional, ya que imprimen en el desplazamiento hacia la derecha.

La PC envía una serie de códigos ASCII. Estos códigos son almacenados en un búffer, que es una memoria de acceso aleatorio de la impresora (RAM). Entre esos códigos existen mandatos que dicen a la impresora que utilice una tabla de fuentes bitmap, contenida en un chip. Luego, esa tabla, envía a la impresora el patrón de puntos que debe utilizar para crear los caracteres representados en código ASCII.

Para formar cada letra, número o símbolo, se activan ciertas agujas, que golpean el papel. En medio hay una cinta entintada. El resultado no es de muy alta calidad (24 agujas dan mejor calidad que 9), pero es de lo más persistente que se puede conseguir y no necesita ningún papel especial. Sin embargo, la capacidad de reproducir gráficos (fotos, ilustraciones complejas) es casi nula.

No obstante, las actuales traen varias tipografías incorporadas de buena calidad y hasta son capaces de imprimir True Type.

Conclusión

Las principales ventajas de esta tecnología son : su capacidad de obtener copias múltiples e imprimir formularios continuos. Su velocidad en texto es de la más elevadas y además su costo y mantenimiento es de lo más bajo que hoy ofrece el mercado.

Como contrapartida sus inconvenientes son: el ruido ciertamente elevado, y la incapacidad de manejar color o varios tipos de fuentes.

En general, las impresoras matriciales de agujas se posicionan como impresoras de precio reducido, calidad media-baja, escaso mantenimiento y alta capacidad de impresión. El fabricante más importante de este tipo de impresoras es Epson, con diversos modelos y precios.

Impresoras de Inyección de tinta

Características Generales

Aunque las impresoras de inyección de tinta estaban disponibles en la década del 80, fue sólo en la de los 90 cuando los precios cayeron, lo suficiente, para llevar a estas impresoras a ocupar un lugar importante en el mercado. Ya existen modelos a menos de U$S 100, y muchas ellas compiten con las láser en calidad de texto y producen imágenes con calidad fotográfica.

El concepto de las impresoras de inyección de tinta es sencillo (arrojar tinta líquida sobre el papel) pero en realidad dependen de una tecnología muy avanzada, a pesar de sus precios accesibles.

Operación

La impresión de inyección de tinta, como la impresión láser, es un método de no-impacto. La tinta es emitida por boquillas que se encuentran en el cabezal de impresión. El cabezal de impresión recorre la página en franjas horizontales, usando un motor para moverse lateralmente, y otro para pasar el papel en pasos verticales. Una franja de papel es impresa, entonces el papel se mueve, listo para una nueva franja. Para acelerar las cosas, la cabeza impresora no imprime sólo una simple línea de pixeles en cada pasada, sino también una línea vertical de pixeles a la vez.

Por lo general, las impresoras de inyección de tinta actuales tienen resoluciones de 600 dpi o más altas, y la velocidad de impresión se aproxima a la de las láser al imprimir en blanco y negro. Una impresora de inyección de tinta rápida puede producir una imagen a todo color de 8 x 10 pulgadas y a 300 dpi en 2 a 4 minutos. Esto significa que produce 7.2 millones de puntos en un tiempo de 120 a 240 segundos, o de 30.000 a 60.000 puntos por segundo. El cabezal de impresión de una impresora típica tiene 64 boquillas para cada color, cada una de las cuales debe ser capaz de activarse y desactivarse a velocidades tan elevadas como 900 veces por segundo, lo cual es sorprendente por tratarse de un dispositivo mecánico.

Cuando surgieron las impresoras de inyección de tinta, los cabezales de impresión estaban diseñados para emitir una corriente continua de diminutas gotas de tinta. Las gotas tenían carga eléctrica estática y se "mezclaban" en el papel o en un depósito de reciclaje por medio de campos cargados. Este procedimiento era deficiente y muy poco preciso. En la actualidad, las impresoras de inyección de tinta dependen de la tecnología de gotas según la demanda. DOD (Drop on Demand) que producen pequeñas gotas cuando se necesitan. Son dos los métodos que utilizan las impresoras de inyección de tinta para lograr que las gotas se arrojen con rapidez: térmico y piezoeléctrico.

Tecnología térmica

Una de las leyendas de la tecnología de las computadoras explica cómo se inventó la impresora de inyección de tinta térmica. Un ingeniero experimentaba con fórmulas de tinta y había cargado algunas en una jeringa. Por accidente, la aguja tocó la punta caliente de un cautín, y salió una diminuta gota de tinta. Canon reclama haber inventado esta tecnología, a la que llamó Bubble Jet, en 1977.

El chorro es iniciado calentando la tinta para crear una burbuja que genera una presión que la fuerza a emerger y golpear el papel. Luego la burbuja colapsa y el vacío resultante arrastra nueva tinta hacia la recámara para reemplazar a la que fue expulsada. Éste es el método favorito de Canon y Hewlett-Packard

Fig. 4. Principio de la tecnología de inyección de tinta térmica.

Diminutos elementos calentadores son usados para expulsar gotitas de tinta desde las boquillas del cabezal

de impresión, estas boquillas tienen un tamaño aproximado al de un cabello humano (aprox. 70 micras,

siendo una micra la millonésima parte de un metro) y expulsan gotas de aproximadamente 8/10 picolitros y puntos de aproximadamente 50 a 60 micras de diámetro. La gota más pequeña que el hombre puede ver a simple vista es de aproximadamente 30 micras, de modo que estas gotas se acercan a los límites de nuestra percepción.

El tamaño increíblemente pequeño de estas gotas posibilita incrementar la resolución del trabajo de impresión. Se requiere de una gota de casi 35 micras para crear una impresión de 720 dpi, de modo que estas gotas se superponen ligeramente en esa resolución.

Los tintes basados en tintas cian, magenta y amarillo son normalmente presentadas vía un cabezal CMY. Algunas gotas pequeñas de tinta de diverso color, usualmente entre 4 y 8, pueden ser combinadas para generar un punto de tamaño variable, una paleta de colores más grande y semitonos más suaves. La tinta negra que es generalmente basada en moléculas más grandes de pigmento, es generada por una cabeza separada con volúmenes de gota de alrededor de 35 picolitros.

La velocidad de impresión es fundamentalmente una función de la frecuencia con la que las boquillas pueden disparar la tinta y el ancho de la franja impresa por el cabezal de impresión. Usuamente es de alrededor de 12.5 MHZ por pulgada, dando velocidades de impresión entre 4 y 8 ppm para texto blanco y negro y de 2 a 4 ppm para texto color y gráficos.

Tecnología Piezoeléctrica

La tecnología piezoeléctrica es una estrategia alternativa, desarrollada por Epson, a la tecnología bubble jet o térmica.

Los cristales piezoeléctricos tienen una propiedad única y singular. Si se aplica una fuerza física en ellos, pueden generar una carga eléctrica. El proceso también funciona a la inversa: aplique una carga eléctrica al cristal y podrá hacer que se mueva, creando una fuerza mecánica.

La cabeza de impresión de una impresora de inyección de tinta piezoeléctrica utiliza un cristal en la parte posterior de un diminuto depósito de tinta. Una corriente se aplica al cristal, lo que lo atrae hacia adentro. Cuando la corriente se interrumpe, el cristal regresa a su posición original, y una pequeña cantidad de tinta sale por la boquilla. Cuando la corriente se reanuda, atrae al cristal hacia atrás y lanza la siguiente gota.

Esta estrategia tiene algunas ventajas. Las cabezas de impresión piezoeléctricas pueden utilizar tinta que se seca con mayor rapidez y pigmentos que podrían dañarse con las temperaturas en una cabeza térmica. Asimismo, como un cabezal piezoeléctrico está integrado a la impresora, sólo se necesita reemplazar el cartucho de tinta. (las impresoras térmicas incluyen las boquillas en cada cartucho de tinta, lo que incrementa el costo del cartucho y, por lo tanto, el costo por página.) El inconveniente es que si una cabeza piezoeléctrica se daña o atora, es necesario reparar la impresora.

Fig. 7. Cabezal Piezoeléctrico

Las últimas impresoras más importantes de Epson tienen cabezales de tinta negra con 128 boquillas y cabezales color (CMY) con 192 boquillas (64 para cada color) logrando una resolución de 720 dpi. Como el proceso piezoeléctrico puede producir puntos pequeños y perfectamente formados con gran eficacia, Epson puede ofrecer una resolución aumentada de 1440 x 720 dpi. Esto es logrado por el cabezal haciendo dos pasadas, con una consecuente reducción en la velocidad de impresión. Las tintas que Epson ha desarrollado para aprovechar esta tecnología son extremadamente rápidas para secarse, penetran el papel y mantienen su forma haciendo que los puntos interactúen unos con otros.

El resultado es muy buena calidad fotográfica especialmente con el papel adecuado.

El costo oculto

La tendencia más marcada de todas en el mercado de las impresoras de inyección de tinta quizá no esté relacionada con las impresoras: la atención se centra en el aspecto de los artículos de repuesto, ya que los usuarios caseros y de negocios notan que todos esos magníficos colores tienen su precio.

En la actualidad, los fabricantes de impresoras siguen un modelo parecido al que sigue el negocio de las máquinas de afeitar: márgenes angostos en el área del hardware para lograr que los clientes regresen a comprar consumibles. Por lo regular, los fabricantes tienen márgenes brutos mucho más altos sobre los consumibles (tinta y papel) que sobre las impresoras. Por ejemplo Hewlett-Packard tiene un margen bruto de 67% sobre los artículos de repuesto para impresoras de inyección de tinta; el doble del margen del 33% para toda la compañía, según un artículo que publicó Business Week el año pasado. Aunque los artículos de repuesto para impresoras de inyección de tinta representan sólo el 5% de las ganancias de la compañía, las ventas de estos consumibles producen un sorprendente 25% del total de las utilidades.

Así el costo de una página a colores típica se eleva aproximadamente a $ 0.15 o $ 0.20. Y los $ 0.04 por página de los documentos de texto sencillo hacen que cuesten más del doble que una impresión en láser.

Existen alternativas para las tintas y el papel de marca, y otros proveedores están ansiosos de compartir el mercado. Algunos ofrecen cartuchos que se vuelven a llenar o a fabricar con ahorros considerables.

Los cartuchos del fabricante para una Epson Stylus Color se venden en aproximadamente $ 30.00 los de tinta y los de color, pero los cartuchos de otras compañías están disponibles por sólo $ 12.00 los de color y $ 8.00 los de tinta negra. Si está dispuesto a correr el riesgo de teñirse los dedos, puede comprar un estuche de $ 50.00 que rellena cartuchos para la HP DeskJet 600 (cinco veces los de tinta negra, y ocho veces cada uno de los cartuchos de tinta de los tres colores que maneja).

Pero los fabricantes de impresoras se apresuran a señalar que no aceptan esos sustitutos. Hacen notar que los cabezales de impresión, las fórmulas de las tintas y el papel están diseñados para trabajar en conjunto, a fin de producir la mejor impresión y obtener una vida lo más larga posible de la cabeza de impresión. Los cartuchos de tinta que se vuelven a fabricar pueden romperse, y la fórmula de tinta equivocada puede causar obstrucciones. Peror aún, si su impresora tiene un problema debido a un cartucho de otra compañía, el fabricante tiene la opción de invalidar la garantía.

Aún así, los otros fabricantes encuentran un mercado, y los fabricantes originales ya sienten la presión de los costos más bajos.

Impresoras de un cartucho

Muchas de las impresoras más baratas tienen espacio para sólo un cartucho. Se puede usar un cartucho de tinta negra para impresión monocromática, o un cartucho de tinta CMY para impresión a color, pero no se puede usarlos a ambos al mismo tiempo. Esto hace una gran diferencia en la operación de la impresora.

Cada vez que se quiera cambiar de blanco y negro a color, se debe físicamente cambiar los cartuchos. Cuando se usa negro en una página a color, éste estará hecho con los tres colores lo que dará como resultado un insatisfactorio verde oscuro o gris usualmente conocido como negro compuesto. De todas maneras, el negro compuesto producido por las impresoras actuales es mucho mejor que lo que era hace unos pocos años, a causa del continuo avance en la química de las tintas.

Impresoras láser

En la década del 80 predominaron las impresoras matriciales y las láser. La impresora láser fue introducida por Hewlett-Packard en 1984, basada en tecnología desarrollada por Canon. La impresora láser trabaja de manera similar a una fotocopiadora, la diferencia es la fuente de luz. Con una fotocopiadora una página es escaneada con una luz brillante, mientras que en una impresora láser es escaneada, obviamente, por un láser. Después de eso el proceso es prácticamente idéntico, con la luz creando una imagen electroestática de la página en un fotorreceptor cargado, que atrae el tóner en la forma de su carga electroestática.

Las impresoras láser rápidamente se volvieron populares tanto por la alta calidad de su impresión, como por sus costos relativamente bajos. Como el mercado de las impresoras láser se ha desarrollado, la competencia entre los fabricantes se ha vuelto cada vez más feroz, con los precios cada vez más bajos y llegando a una resolución de 600 dpi como estándar, además de fabricar impresoras cada vez más pequeñas y con más prestaciones para el usuario hogareño.

Las impresoras láser tienen unas cuantas ventajas sobre sus rivales de inyección a tinta. Producen texto en blanco y negro de calidad superior, tienen un ciclo de trabajo de más páginas por mes y un costo más bajo por página. Así que si una oficina necesita una impresora para una carga de trabajo importante, las impresoras láser son la mejor opción.

Considerando lo que sucede dentro de una impresora láser, es sorprendente lo que puede ser producido con poco dinero. De muchas formas, los componentes que la forman son bastante más sofisticados que los que se encuentran en una computadora. El RIP (Raster Image Processor) puede usar un procesador avanzado RISC. La ingeniería de los soportes de los espejos es muy avanzado, además realiza la impresión sin producir prácticamente ningún sonido. El llevar la imagen desde la pantalla de la PC hasta el papel, requiere una interesante mezcla de codificación, electrónica, óptica, mecánica y química.

Comunicación

Una impresora láser necesita tener toda la información acerca de la página en su memoria antes de que pueda empezar a imprimir. Como una imagen es comunicada desde la memoria de la PC hasta una impresora láser depente del tipo de impresora que esté siendo usada. La solución menos sofisticada es la transferencia de una imagen bitmap. En este caso no hay mucho que la computadora pueda hacer para mejorar la calidad, así que mandar punto por punto es todo lo que puede hacer.

De todas maneras, si el sistema sabe más acerca de la imagen que puede mostrar en la pantalla, hay mejores maneras de comunicar los datos. Una hoja estándar A4 mide 8.5 pulgadas de ancho por 11 de alto. A 300 dpi, eso es más de 8 millones de puntos comparados con los 800.000 pixeles en una pantalla de 1024 x 768. Hay un obvio espacio para una imagen más exacta en el papel, incluso más a 600 dpi, donde la página puede tener 33 millones de puntos.

La mejor manera en que la calidad puede ser mejorada es enviando una descripción de la página conteniendo información vectorial outline y permitiendo a la impresora de hacer el mejor uso posible de ésta. Si a la impresora se le dice que dibuje una linea de un punto a otro, puede usar el principio de geometría básico que dice que una línea tiene longitud, pero no ancho, y dibujar esa línea de un punto de ancho. Lo mismo sucede con las curvas que pueden ser tan finas como la resolución de la impresora permita. La idea es que una simple descripción de la página puede ser enviada hacia cualquier dispositivo adecuado, la cual subsecuentemente la imprimirá según su capacidad. De aquí el muy usado término de dispositivo independiente.


Operación

Cuando la imagen a ser impresa es comunicada a través de un lenguaje

de descripción de página, el primer trabajo de la impresora es convertir las instrucciones en un mapa de bits. Esto es hecho por el procesador interno de la impresora, y el resultado es una imagen (en memoria) de cada punto que será ubicado en el papel. Los modelos designados como Windows printers no tienen sus propios procesadores, así que la PC anfitrión crea el mapa de bits, grabándola directamente en la memoria de la impresora.

El corazón de una impresora láser es un pequeño tambor rodante - el cartucho orgánico fotoconductor (OPC) - con un revestimiento que le permite mantener una carga electrostática. Un láser recorre la superficie del tambor, colocando selectivamente puntos de carga positiva, que representarán la imagen de salida. El tamaño del tambor es el mismo que el del papel en el cual la imagen aparecerá, cada punto en el tambor correspondiendo a un punto en la hoja de papel. En el momento apropiado, el papel es pasado a través de un cable cargado eléctricamente que deposita una carga negativa en él.

En las verdaderas impresoras láser, la carga selectiva es hecha por las interrupciones on y off del láser durante el escaneo del tambor, utilizando un complejo sistema de espejos y lentes giratorios. Estos espejos giran increíblemente rápido y en sincronización con las interrupciones del láser. Una impresora láser típica, puede perfectamente realizar millones de interrupciones cada segundo.

Dentro de la impresora, el tambor rota para construir una línea horizontal por vez. Claramente, esto tiene que ser hecho de una manera muy eficiente. Cuanto más pequeña la rotación, más alta será la resolución de la página. La rotación de una impresora láser moderna es típicamente 1/600 de pulgada, dando 600 dpi de resolución vertical. De manera similar, cuanto más rápidas sean las interrupciones on y off del láser, más alta será la resolución horizontal.

Mientras el tambor rota para presentar el área próxima para el tratamiento con el láser, el área escrita se mueve hacia el tóner. El tóner es un polvo negro muy fino negativamente cargado, lo que causa que sea atraído hacia los puntos con cargas positivas en la superficie del tambor. Así, después de una rotación completa, la superficie del tambor contiene toda la imagen a imprimirse en la página.

Una hoja de papel (cargado positivamente) luego entra en contacto con el tambor, alimentado por una serie de engranajes lisos. Mientras completa su rotación va tomando el tóner del tambor a causa de su atracción magnética, transfiriendo así la imagen al papel. Las áreas del tambor cargadas negativamente no atraen el tóner, lo que resulta en las áreas blancas de la impresión.

El tóner está especialmente diseñado para derretirse muy rápidamente, y un fuser (o fusionador) aplica calor y presión al papel para hacer que el tóner se adhiera permanentemente. Por esto es que el papel sale de una impresora láser caliente al tacto.

La etapa final es limpiar el tambor de algún remanente de tóner, para poder comenzar el ciclo de nuevo.

Hay dos formas de limpieza, físico y eléctrico . Con el primero el toner que no ha sido transferido a la página es mecánicamente quitado de la página, y un colector de tóner de desperdicio lo deposita en un compartimiento. La limpieza eléctrica consiste en cubrir al tambor con una carga eléctrica uniforme, permitiendo que el láser pueda escribir de nuevo. Esto es hecho por un elemento eléctrico llamado cable corona. Ambos elementos, tanto el pad que limpia el tambor como el cable corona, necesitan ser cambiados regularmente.

Muchas de las llamadas impresoras láser son actualmente del tipo LED. Estas impresoras LED son una alternativa más barata que las láser convencionales. El láser y los espejos son reemplazados por una línea fija de LEDs. A 300 dpi una impresora de este tipo tiene 300 LEDs por pulgada, a lo ancho de la página. La ventaja de este tipo de impresoras es, obviamente, el precio, porque la línea fija de LEDs la hacen más barata que una verdadera láser, que tiene muchas partes móviles. La desventaja tiene que ver con la calidad de impresión, porque la resolución horizontal es absolutamente fija, y no pueden aplicarse actualizaciones como en las verdaderas láser. Las impresoras LCD trabajan con un principio similar, usando un panel de cristal líquido como fuente de luz.

Los caracteres del texto están hechos de líneas y curvas, así que pueden ser manejados de la misma manera, pero la mejor solución es usar una forma de fuente predescrita, como True Type o Type 1. Además de la ubicación precisa, el lenguaje de descripción de página (PDL) puede tomar la forma de una fuente y manipularla a escala, rotarla, etc. Hay una ventaja adicional de sólo requerir un archivo por fuente en oposición a un archivo por cada tamaño del punto. Teniendo outlines predefinidos para las fuentes, se permite a la computadora enviar una cantidad pequeña de información - un byte por carácter - y producir texto en cualquiera de los diferentes estilos y tamaños de fuentes.